Desde su descubrimiento en 2013, el Bloque LL58-4 ha sido testimonio de una operación eficiente, técnicamente rigurosa y socialmente consciente. Con más de 6,7 millones de barriles producidos a la fecha, el campo ha mantenido un control estricto sobre el uso de recursos hídricos, la disposición de aguas residuales, el manejo de residuos y la seguridad del personal. Andes Operating demuestra que incluso en campos maduros, es posible crear valor compartido entre empresa, comunidad y medio ambiente.